El que no ha amado en esta vida no sabe lo que es vivir. El que ama y sirve, sirve su vivir. Pero no todo lo que brilla es oro y uno debe de aprender a vivir así, a veces el amor no es lo que parece y otras amamos lo que no se debe amar. Aprendí a esperarte en los días soleados y en aquellos con lluvia, en los días para celebrar y en los que solo pasaban por pasar. Te he deseado como nadie más podrá hacerlo,porque tu y sólo tu eres poesía
Goodbay
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28 feb 2014
BAJO MI ALMOHADA
Guardo un millón de historias debajo de mi almohada.
Guardo un pequeño recuerdo de cuando nos conocimos,
la primera canción que me cantaste al oído y el tacto de tu mano cuando me rozaste bajo la mesa.
Guardo una carta desteñida, por pasarme años besándola en tu ausencia.
Guardo una caja vacía, donde me prometí meter los malos recuerdos de días oscuros.
Sigo guardando tu risa. La guardo en un bote que puse donde no pudiera alcanzar,
porque no quiero que un día me falte y no tener dónde recordarla.
Sigo guardando tu ausencia, para no acostumbrarme nunca a tus mañanas y que siempre sea como el primer día,
aunque tantos años no sean nada.
Guardo tus inseguridades y miedos, para ayudarte a romperlos el día que nos decidamos a atravesar ese muro.
Guardo tus noches en vela, para sujetarte la cabeza y poder susurrarte que todo está bien, que todo sigue bien.
Guardo una camiseta con tu perfume, para no olvidar el olor de tu presencia.
Guardo nuestro pasado, el que nos trajo hasta el día de hoy y el que nos hizo como somos.
Guardo nuestra sinceridad y nuestra entrega, nuestra fidelidad y nuestra manera de no decirnos nada y la vez decirlo todo.
Guardo tus silencios y tus miradas, esas que me han acompañado siempre cuando creía que no tenía a nadie más al lado y que,
sin embargo, nunca me hicieron sentir sola.
Guardo tus días huraños, que me hagan valorar aquellos de risas eternas.
Guardo nuestros malos momentos, nuestras riñas y nuestros desprecios,
porque también son parte de lo que nos hizo ser enteros.
Guardo cada palabra que te arranqué los días que no querías decir nada.
Guardo tus sonrisas por la mañana, tus “te quiero”, tus “buenos días”
y la forma que tienes de arañarme la espalda..
Guardo nuestros días enteros, porque nosotros estamos hechos de recuerdos.
Guardo la almohada donde cada noche me tumbo a sellar nuestro pasado.
Guardo un viejo álbum de fotos donde dejé unas páginas en blanco para regalarte mi futuro.
Guardo tus besos y tus caricias.
Guardo tu mano en mi pelo. Te guardo todo, siempre, eterno. Te guardo bajo mi almohada.
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