PRINCESA DE NADIE

Te miro fijamente a los ojos y por un instante el mundo desaparece a nuestro alrededor y solamente quedamos tú y yo.

Me pregunto qué habré hecho en esta vida lo suficiente bueno como para merecerte
y por mucho que lo intento no encuentro respuesta,

supongo que el destino decidió regalarme un ángel y desde entonces yo he hecho todo lo posible y lo imposible por merecer tan excepcional presente. 

Despierto al amanecer y te veo dormir plácidamente a mi lado, tan dulce y precioso... de pronto,

Una tímida sonrisa se dibuja en tus labios e imagino que sueñas con algo hermoso, daría mucho más que un simple penique para averiguar ese sueño y poder tornarlo en realidad. Siempre he deseado eso desde el fondo de mi alma, cumplir todos tus sueños.

Me encantaría encontrar las palabras para decirte cuánto te amo, pero sé que es un esfuerzo en vano,

que esta pequeña carta emborronada por mis garabatos es un pobre intento de encerrar tantos sentimientos, de atesorar tantos momentos.

Cuanto te beso cierro los ojos y confío ciegamente en que mis besos, mis caricias y mis miradas

sepan decirte todo lo que mi pobre lírica no es capaz de expresar.

Nací músico y seguramente no sepa dominar las palabras que no aparecen abrigadas por una melodía,

puede que esta noche te cante al oído secretos de los que tú y yo guardamos, a la luz de las velas o escondidos entre las sábanas de una habitación bajo el reflejo de la luna. 

Algunos creen que el amor solamente vive en las grandes historias, en hazañas en las cuales se recita poesía bajo el balcón y el héroe acaba trepando por la pared del castillo, hasta la alcoba más alta de la más alta torre pero...

mi vida me ha enseñado que no, que las pequeñas cosas, los pequeños detalles, pueden acabar siendo lo más importante que has tenido en la vida.

Reír a tu lado y hacerte cosquillas hasta que me suplicas que pare, tumbarnos en el césped bajo las estrellas y dibujar con los dedos sobre el cielo nocturno formas imposibles, pensar en la última locura que nos resulta divertida y hacerla sin pensar dos veces, discutir sobre quién quiere más a quién para acabar negociando un empate, verte arrugar la nariz cuando algo no te gusta y que me pongas ojitos de niña buena para que te conceda un último capricho...

La suma de todos esos pequeños momentos, de todas esas pequeñas cosas que compartimos y que nos hacen tan especiales, es para mí lo más grande que tengo en esta vida y sueño con más tardes abrazados en el sofá, con más noches a la luz de las velas y con más amaneceres con tu cabeza apoyada sobre mi pecho y mis brazos atrayéndote hacia mí. 

Te quiero, te quiero más de lo que nunca podré decirte, te quiero más de lo que jamás soñé amar a nadie, te quiero rompiendo todos los límites conocidos y los que están aún por conocer, te quiero por ser tú, por amarme tal y como soy, y por hacerme mejor persona compartiendo mi vida contigo. 

Quédate conmigo y prometo susurrante al oído cada noche lo mucho que te amo, hasta que te quedes dormida entre mis brazos y yo pueda quedarme dormido tumbado junto a ti soñando en despertar para vivir otro día más a tu lado