Un día llegó a mi vida, la pintó de lunares amarillos y desde entonces supe que jamás podría
vivir sin ella.
Ella, que con su risa es capaz de iluminar la noche más negra.
Ella, la más despistada del mundo.
Ella, la mejor y más flamenca que jamás he conocido.
Ella, que va enamorando según pasa como si no le costase.
Ella, la más estrecha.
Ella, que es mi mitad y que me conoce mejor que nadie.
Ella, mi mejor amiga, mi 'hermana', mi familia, mi todo.
Sé que no estoy diciendo nada nuevo, que todo el mundo lo sabe.
Ella también lo sabe, pero le gusta escucharlo. Por eso quiero recordarle por qué siempre
me giro hacia ella.
Gracias por cruzarte en mi camino.
Todos tenemos a alguien así ... aunque solo sea en mente.
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